Memoria Celular Más Allá del Cerebro: Hallazgos Científicos Validan la NeuroPsicoKinesis y la Terapia Energética Holística
- Theo Weber Guzman
- 8 may
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Actualizado: hace 3 días
La NeuroPsicoKinesis (NPK) sostiene desde sus inicios que el pensamiento y la memoria no se limitan a la actividad cerebral, sino que involucramos al corazón y al intestino como polos cognitivos esenciales. Un hallazgo reciente publicado en Nature Communications demuestra que células no neuronales humanas exhiben el “efecto de espaciado” —un mecanismo clásico de aprendizaje y retención— de forma análoga a las neuronas, lo que implica que la capacidad de “recordar” está presente en tejidos tan diversos como la piel o el endotelio vascular Comunidad Biológica.
Esta evidencia refuerza la premisa de NPK de que nuestro “campo de conciencia” opera a lo largo de todo el cuerpo. Estudios sobre las mioquinas —proteínas secretadas por las fibras musculares durante el ejercicio— han mostrado que influyen en la plasticidad neuronal y en la formación de memoria en el cerebro, lo que subraya la interconexión funcional entre los músculos y las zonas típicamente asociadas al aprendizaje Wikipedia. Por su parte, la “pequeña mente” del corazón, documentada en trabajos de la Universidad de Jefferson, actúa como un controlador local que modula ritmos y respuestas al estrés, sugiriendo que el músculo cardiaco contribuye a procesos adaptativos que podríamos interpretar como formas de “memoria cardíaca” PMC.
Asimismo, la investigación en el sistema nervioso entérico revela que el intestino no es un mero receptáculo de señales, sino una red capaz de aprender y almacenar patrones de comportamiento digestivo y metabólico. Revisiones recientes confirman que el ENS (enteric nervous system) muestra plasticidad y respuesta condicionada a estímulos repetidos, constituyendo un “segundo cerebro” con capacidad memorística autónoma PMC. Esta tríada —cerebro, corazón e intestino— forma la base corporal de la cognición extendida postulada por la NPK.
En el marco terapéutico, la NPK utiliza técnicas de sanación energética que resuenan con el concepto de biofield therapy: interacciones entre el terapeuta y los campos bioeléctricos propios y del paciente, buscando modular la “memoria celular” de órganos enfermos PMC. Ensayos in vitro han demostrado que sesiones de biofield therapy pueden alterar comportamientos de células tumorales, reduciendo su invasividad en modelos de cáncer de páncreas Nature. Estos resultados sugieren que la aplicación de técnicas energéticas —a través de intenciones focalizadas y maniobras sobre el campo cuántico del cuerpo— puede “reprogramar” las rutas de memoria celular en órganos afectados, restaurando su función óptima.
En conclusión, la evidencia emergente de memoria celular fuera del sistema nervioso central valida el paradigma de la NPK: nuestra conciencia opera como un campo integral, donde cerebro, corazón, intestino y demás tejidos interactúan en un entramado de memoria y energía. La terapia energética se erige entonces como la vía para sintonizar y reprogramar estas memorias celulares disfuncionales, ofreciendo un enfoque holístico y cuántico para la sanación de órganos enfermos.
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